A finales del siglo XIII, las
monarquías europeas y la burguesía, empezaron a reforzar el poder. Pensaron en
contraponerse a la nobleza feudal y construir monarquías nacionales, pero este
intento dio origen a muchas guerras entre los monarcas europeos por la crisis
entre los siglos XIV – XV.
En el siglo XII, los monarcas
aprovecharon el crecimiento económico y el auge de la burguesía, para imponer
su autoridad sobre la nobleza feudal. Además
de eso, garantizaron la unidad y la estabilidad del territorio. En ese caso
tendrían que pagar a más soldados y armas para ellos, por esta razón
necesitaron mucho más dinero. Durante ese periodo los monarcas estuvieron
viviendo en la burguesía, la cual cada vez era más rica y tenía más poder, este
les podía dar dinero a cambio de las protección. De ese modo recibieron cartas
de privilegiados los cuales les hacían libres, ya no dependerían de un señor
feudal. Además de las cartas, les dieron algunos derechos de monopolio
comerciales, permisos para establecer un mercado y un poder para poder moverse
libremente por todo el reino.
Como los burgueses eran
conscientes de que necesitaban libertad y más seguridad Para realizar todas las
actividades, como por ejemplo: comercios por senderos, mares y ciudades. Por todo
eso que les dieron los monarcas, los burgueses les ofrecieron de parte de los
privilegiados reales a los monarcas ayuda económica.
En las reuniones del Consejo,
formado por la nobleza y clero presente, se aceptó la presencia de los
burgueses. Las reuniones convocadas por el rey, junto a los tres estamentos se denominaban
cortes o parlamentos. La intención del rey en estos casos de reunión, a parte
de hacer ver a la gente la importancia de este estamento, era la petición de la
aportación en metálicos de estos. Antes de recibir la aportación, debían
escuchar las aportaciones de los burgueses, las quejas o ideas, ya que la
importancia o el cargo era el mismo.
A principios del siglo XIV, se
produjo una crisis agraria. Debido al aumento de población en los anteriores
años, los cultivos eran poco productivos. Además, los cambios del clima dieron
lugar a malas cosechas. Ya que las cosechas no fueron como lo deseadas, el
hambre se expandió por todo el continente. Además de la llegada de la peste
negra, la cual provocó una gran mortalidad. Las guerras dieron origen a saqueos
y destrucciones. Teniendo en cuenta todos estos elementos, se originó una
crisis generalizada.
La guerra de los cien años fue un enfrentamiento entre
Francia e Inglaterra entre 1337 y 1453. La guerra fue comenzada por una
sucesión de corona de Francia y la pretensión del monarca inglés. El conflicto
finalizó con la victoria de Carlos VII de Francia, que pudo recuperar todos los
territorios, excepto Calais. Este triunfo significó el fortalecimiento de la
monarquía ligada a un territorio nacional y el fin de la monarquía feudal.
B13 Miriam y B20 Judit
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.