sábado, 18 de marzo de 2017

Epidemias

Las epidemias en esas épocas eran muy graves y frecuentes en el mundo medieval. Estas no se podían comparar con la peste negra iniciada en 1348 en Europa, ya que no había ningún remedio para ella. Fue una enfermedad infectocontagiosa, causada por una bacteria. La principal transmisión por la que se causaba eran las picaduras de estas, pero estas picaban antes a otros roedores, los cuales también las transmitían. Los síntomas de esta enfermedad eran fiebre, problemas a la hora de respirar y problemas circulatorios, estos terminaban por dar un color negruzco al cuerpo que lo padeciera. Por la causa de ese color en la piel se dice Peste Negra.

La Peste Negra se originó en Oriente y se dice que llegó hasta el Occidente a través de unas naves genovesas, las cuales la esparcieron de una forma imparable y fulminante. Las única forma de protegerse era el aislarse de todo lo posibles y quemar todos los objetos de sus pertenencias. Esta enfermedad traía rápidamente la muerte, por eso a cualquier persona que le saliera en el cuerpo algo semejante a un bulto o úlcera, era abandonado.

Consecuencias de la peste negra:

Esta enfermedad causó un impacto demográfico ante toda la historia Occidental, haciendo referencia al 30 o 40% de la población, el cual se reduce de 73 a 45 millones de habitantes. Parte de las ciudades y las tierras se quedaron abandonadas, por la gran mortalidad y el abandono de estos lugares. Además durante un tiempo se dejó de practicar el comercio y la artesanía.

La muerte y despoblación redujeron los ingresos de los señores feudales. Ya que tenían menos siervos a los que cobrar se hizo el intento de aumentar el sueldo a todos los campesinos sobrevivientes. Los campesinos se rebelaron violentamente contra los señores feudales, ya que no aguantaban más el hambre, la epidemia y las guerras. Las ciudades, también sin trabajo se rebelaron contra el patrimonio urbano.


El fuerte sentimiento religioso atribuyó la epidemia a un castigo divino, por todos los pecados causados de la población y la corrupción de la iglesia. Se llegaron a hacer procesiones y flagelaciones, para pedir perdón sobre aquellos actos. Además se inició un movimiento de reforma de la iglesia.


B13 Miriam y B20 Judit

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