Catedrales

Según los cristianos las catedrales eran la gloria del Medievo cristiano y se impulsó por su seguridad política, su aumento en la población, el desarrollo progresivo de las ciudades y la peregrinación a lugares santos ( como Santiago de Compostela, Jerusalén o Roma). Gracias a ello se aumento el tamaño y la majestuosidad de las catedrales.

Las catedrales servían como lugar de apredizaje de la religión y de las normas de comportamiento.
Existían dos estilos de catedrales: La gótica: desde mediados del siglo XII hasta la implantación del Renacimiento. En ella se representan episodios del Evangelio. Coincide con el resurgimiento de las ciudades, donde se desarrollaron la burguesía y las universidades, y con la aparición de nuevas órdenes religiosas. Y se caracteriza por la iluminación, la escultura , la cruz latina, el arco apuntado, las bóvedas de crucería y los pilares. El románico: se inició en el siglo XI y tuvo su plenitud en el siglo XII. Reflejaba una sociedad rural de guerreros y campesinos. Se caracteriza por la bóveda de cañón, una torre con campanario, arco de medio punto (bóveda de arista), un cimborrio y un altar con el ábside.
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Las catedrales más conocidas de España son: la Virgen de la Almudena, en Madrid. La catedral de San Isidro Labrador, en Madrid. La Virgen de la Encarnación, en Almería. San Pedro, en Soria. La catedral de Santiago, en Bilbao. La Sagrada Familia, en Barcelona. San Juan Bautista, en Badajoz. Y la Virgen de Prado, en Ciudad Real. Las catedrales han sido muy importantes en la historia, por ejemplo la de Santiago de Compostela es uno de los más imponentes edificios de su época, para albergar las reliquias del apóstol. Esta catedral es la más importante de las románicas que se conservan.

A09 Tamar, A20 Isabel y A23 Ana