CATEDRALES

CATEDRALES EN LA EDAD MEDIA

La manera de mostrar la devoción a la Iglesia en la Edad Media fue con la construcción de grandes catedrales  y monasterios. Las catedrales  fueron el núcleo espiritual y social de la ciudad ya que en él se rezaba, se enseñaba y se santificaban las fiestas. Con la edificación de una catedral se quería reunir a los cristianos, aumentar la devoción, y dar prestigio al lugar.

Fueron los edificios más grandes de la Europa medieval, y  se podían encontrar incluso en el centro de los pueblos y ciudades de todo el continente. 

Hay dos estilos principales de catedrales medievales: el románico y el gótico.

Las catedrales de estilo románico se construyeron  entre los  siglos X y XIII,  estas eran  sólidas construcciones con  arcos de mampostería redondeados, bóvedas de cañón, grandes pilares para sostener los techos, arcos,  paredes gruesas y fuertes  de piedra y  ventanas pequeñas.

Alrededor del año 1200, los constructores de iglesias comenzaron a adoptar un nuevo estilo arquitectónico, conocido como el gótico, en el que emplearon nuevas técnicas de construcción.

Gracias al renacer cultural y económico, en las ciudades aparecieron numerosos grupos de canteros (asociados en logias), albañiles y carpinteros todos ellos dirigidos por maestros de obras y arquitectos.

Las obras normalmente eran financiadas por aportaciones de los gremios de artesanos y mercaderes, la colaboración del rey,  el obispo  y los nobles de la ciudad junto con el pueblo llano.

Burgos

Las construcciones góticas  son generalmente más grandes y mas iluminadas,  incluyen adornos más decorativos, grandes ventanales, altos  techos, agujas y arbotantes, dando gran ligereza a la construcción, todo ello gracias a la introducción de nuevos  avances arquitectónicos que permitieron paredes más delgadas y ligeras.

Las características más importantes de las construcciones góticas fueron: 

• Nuevo arco, menos pesado llamado apuntado u ojival, por su forma.
• Bóveda de crucería, se forma por el cruce de dos arcos ojivales, con cuatro puntos de soporte (columnas o pilares),  de esta forma  el peso del techo no descansa sobre los muros y en ellos se pueden abrir ventanales o rosetones.
• Uso de arbotantes y contrafuertes, en la parte exterior, repartiendo el peso y sujetando las bóvedas.
• Suele haber varia fachadas, en la principal suele haber tres puertas,  que suelen tener profundos pórticos, adornados con personajes del antiguo y nuevo testamento. 
• Rosetones y ventanas con vidrieras, permitiendo el paso de la luz al interior.
• Elementos decorativos como los  pináculos, glabetes y galerías de estatuas.

C19 ABIGAÍL - C23 BETSABÉ