En las ciudades, se intercambiaban todo tipo de productos. Hay "mercados semanales" o "diario", pero el comercio a larga distancia, es decir "Ferias", las que permiten el crecimiento de grandes ciudades.
El jueves es día de mercado en la ciudad. Los artesanos que están en barrios más lejanos colocarán sus tenderetes en la plaza.
Los campesinos acudirán para comprar productos agrícolas y ganado para vender. Y adquirían productos artesanos.
También vendrán mercaderes, venden productos que no se encuentran en la ciudad.
El día del mercado lo aprovecha la gente de los alrededores de la ciudad para ir al barbero. Y también es un lugar que se enteran de las noticias de la comarca.
Ferias:
Eran los puntos de reunión de los mercaderes que seguían las rutas terrestres. En Flandes y Italia eran las dos zonas industriales más desarrolladas del Occidente medieval.
En algunos ciudades hay unos días especiales para realizar estas ferias, la más famosa era Champagne de Francia. En las ciudades, los monarcas y algunos señores locales, promulgaron leyes para proteger a los mercaderes.
Todas las grandes ciudades comerciales, enviaban cónsules o representantes encargados de defender sus intereses o de efectuar ciertas compras. Las ferias se desarrollaban con un ritmo preciso, los mercaderes podían instalarse sus mercaderías. Después llegaba el período de las ventas.
Cada artículo era tratado por turno. Tras un tiempo determinado, acababan las transacciones dichas y comenzaba la "salida", en la que se hacían las cuentas y se efectuaban las liquidaciones.
Estas operaciones de pago al fin de la feria permitían hacer negocios más importantes, cada uno podía comprar y vender por más dinero del que tenía en circulación. En el sistema de intercambio permitía paliar la insuficiente de metales preciosos. No era raro ver vender más de 50000 piezas de paño de origen flamenco.
C06 Jonás
026 Saúl
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.